"LA VIDA ES UN REGALO"

Así es como lo siento. Por eso creo que la mayor responsabilidad que tengo es trabajar en mí misma para dar lo mejor de mí a los demás, y con ello, compartir mi pasión y vocación.
Soy Fina Esclapez. Psicóloga sanitaria colegiada nº CV09575
Te ayudo a entender y expresar tus emociones, sanar tus heridas y traumas de la infancia, fortalecer tu Autoestima y liberarte de cargas emocionales que te impiden disfrutar y ser feliz.
Mi objetivo es ayudarte a alcanzar la libertad emocional y que puedas tomar tus propias decisiones para tener la vida que deseas. Porque nada te puede dar más satisfacción que sentir que eres tú quien dirige tu vida.
Mi Currículum:
- Licenciada en Psicología. Especialidad Clínica. UNED. Colegiada CV-09575
- Psicóloga General Sanitaria. Acreditada por el Colegio Oficial de Psicólogos e inscrita en Consellería de Sanidad.
- Terapeuta Gestalt y Sistémica.
- Formada en Análisis Transaccional, Eneagrama, PNL, etc...
- Diplomada en Constelaciones Familiares.
- Especializada en Terapia Emocional.
- Directora de Psicogestalt, Centro Sanitario autorizado e inscrito en Sanidad con el número 13925
Uno de los errores más comunes que me encuentro en consulta es cuando la persona evita o bloquea las emociones que no le gustan, ¿Lo haces tú también?
Si es así, déjame decirte que las emociones son la brújula que te guía hacia el bienestar psicológico y mental.
Y también que el 80% de tu éxito depende de tus emociones y como te manejas con ellas. ¿Lo sabías?
Acompaño a mis pacientes y alumnos a trabajar las emociones que les limitan y bloquean, sanar las heridas de la infancia y sus traumas emocionales.
Esto se traduce en una persona plena que afronta los desafíos que se presentan y siente que es ella quien dirige su vida.
Un poco más de mi: Los cambios que da la vida...

Llegué a la psicología por esos caprichos del destino, inexplicable entonces... Llevaba tiempo con mucha incertidumbre y confusión interna, sentía que no estaba en mi lugar, que mi vida no me satisfacía...
Un día acudí a una charla en el cole de mis hijos en la que un psicólogo nos explicó que si nosotros, como padres, trabajábamos nuestras emociones, nuestros hijos podrían sentirse mucho mejor.
Aquellas palabras tuvieron un efecto en mi interior, resonaron en mi e hicieron que se encendiera una luz de esperanza.
Presté mayor atención a sus palabras y dijo que llevaba grupos de terapia y crecimiento personal.
Y ahí empezó todo: un mundo nuevo de oportunidades se abrió ante mí y pensé que podría conseguir liberarme de mi angustia y depresión y descubrir la vida que realmente quería tener.
Inicié una etapa de proceso personal en un grupo de terapia, me sentía cada vez mejor y más motivada, por lo que empecé a intuir que había otro horizonte y un camino que yo quería recorrer y explorar.
Durante el tiempo de oscuridad me di cuenta de lo mucho que me afectaba la relación con mi madre y me hacía muchas preguntas:
- ¿Por qué mi relación no se aparecía a ninguna de las que yo veía?
- ¿Porque sentía el rechazo de mi madre toda mi vida?
- ¿Cómo se habían manejado las emociones en mi familia?
- ¿Cuáles eran mis carencias afectivas?, etc, etc…
- Y sobre todo ¿Qué podía hacer yo?...
Cantidad de preguntas para las que aún no tenía respuesta pero que ya vislumbraban una luz…
Finalmente, cuando emocionalmente estaba más estable y sabía que quería seguir en ese camino de descubrimiento, decidí matricularme en la universidad y dejar el negocio que había emprendido años atrás.
¡La vida me estaba empujando hacia delante!
Un poco más íntimo...
No fue nada fácil. Por aquel entonces estaba embarazada de mi tercera hija. Tenía una casa, un marido, tres hijos que atender y casi 40 años... Y allí estaba yo, haciendo un esfuerzo titánico, estudiando una carrera universitaria y a la vez, haciendo formación en otras terapias humanistas (hice la formación en Gestalt y en Sistémica a la par que la carrera universitaria).
Fue agotador, pero en siete años conseguí mi título de Psicóloga y mis certificados de Formación en las otras terapias.
Todo eso me pasó factura. En el último año de carrera, estaba realmente exhausta por el sobreesfuerzo, y mi cuerpo no pudo más. Empezó a fallarme y tuve que acudir a varios médicos para saber qué me estaba ocurriendo. Fue entonces cuando me diagnosticaron una enfermedad desconocida entonces para mí: fibromialgia.

Así que, acabé la carrera y ahí estaba yo, con mi flamante título, físicamente agotada y sin saber por dónde empezar. Pasé un año reflexionando sobre mi salud y cómo recuperarme, qué hacer con mi vida ahora que ya había conseguido este nuevo y duro reto, y también leyendo libros sobre esa enfermedad que sufrí por el camino, y así fue como creé un programa de trabajo de 8 semanas para enfermos de fibromialgia, que yo misma seguí con notable mejoría.
En aquel momento no tenía ni idea de cómo volver al mercado laboral, pero se me ocurrió ir a la Asociación de Fibromialgia de mi ciudad y ofrecer mi Programa para el Control de la Fibromialgia. Me contrataron para que trabajara con las mujeres asociadas, que siguieron el programa que yo había creado y mejoraron muchísimo.
Ese fue el empujón que necesitaba para comenzar en mi nueva profesión y que me llevó a que cada vez más personas confiaran en mi y solicitaran mi ayuda y acompañamiento para sanar sus síntomas y, también, sus emociones y creencias.
Desde entonces mi objetivo es ayudar a las personas a conectar con su fuerza interior. Estoy aquí para acompañarte a descubrir todo tu potencial, ese que te identifica como un ser único y especial. Creo firmemente que todos tenemos algo que ofrecer al mundo, algo que nos hace diferentes, alguna historia interesante que contar.
Quiero que me sientas como una compañera de viaje y sepas que, con mi formación y mis propias vivencias, puedo ayudarte e iluminar tu camino si estás atravesando “la noche oscura del alma”, como describió San Juan de la Cruz al sufrimiento y la soledad.
¿List@ para saber más y conseguir salir de tu sufrimiento?
Ponte en contacto conmigo y te diré cómo te puedo ayudar
Mi misión es acompañarte a descubrir las cualidades que hay en ti.
Créeme si te digo que, el Camino merece la pena. Te aseguro que, aunque a veces te parezca complicado, la salud psicológica y emocional, y tu propio bienestar personal, serán tu mejor premio.
Empieza hoy a transformar tu vida. Y, sobre todo, confía en Psicólogos Colegiados.